Como ya se ha visto en previas entradas de este blog, la ciencia está presente en todos los ámbitos de nuestra vida. En el día de hoy, hablaremos de cómo la ciencia está muy bien integrada en el arte, aunque no lo parezca a simple vista: los elementos químicos.
¿El color verde mató a Napoleón?
Napoleón Bonaparte murió el 5 de mayo de 1821, en la isla de Santa Elena, debido a un cáncer de estómago. Sin embargo, años más tarde, se realizó una segunda autopsia por la rara conservación del cuerpo y se encontró hasta cien veces más de arsénico por todo su cuerpo de lo que hoy en día consideraríamos normal. La razón de la conservación del cuerpo de Napoleón se debe al arsénico, ya que tiene propiedades antimicrobianas y antibacterianas que pueden ralentizar la descomposición y preservación de los tejidos.
En seguida, este hecho levantó sospechas de posible envenenamiento por sus mayores adversarios. Y, así fue, Napoleón murió por envenenamiento... pero, de manera accidental y por culpa suya.
Para saber qué paso realmente, remontémonos a:
El verde de Scheele
Este pigmento, conocido por verde esmeralda o verde de París, y con una fórmula química CuHAsO₃, fue sintetizado por el sueco Carl Scheele.
La receta secreta de este peculiar químico se basaba en simplemente calentar una disolución de carbonato de sodio con óxido de arsénico, añadir sulfato de cobre y calentar el precipitado formado.
Sin embargo, a pesar de saber todos de su alta toxicidad, al año siguiente se llevó al mercado. Imagínate que de tóxico era que hasta The Lancet advirtió de los peligros de este pigmento con un gran titular: "El niño que chupó unas tiras de papel de verde de Scheele y apenas escapó con vida".
El verde de Scheele, además de utilizarse en pintura, también se utilizaba en vestidos, libros, velas... y para colorear el empapelado de la casa de Napoleón. A partir de esto, la primera hipótesis de su muerte fue que el pigmento de la pared se iba descascarillando hasta el punto de entrar en su aparato respiratorio y la segunda (y la más convincente) es que el moho producido por la humedad de la habitación de Napoleón metabolizara el arsénico, produciendo unos metabolitos o productos volátiles tremendamente perjudiciales.
Sin duda, la muerte de Napoleón no fue un asesinato premeditado.
Por qué los girasoles se marchitan
A pesar de que en su momento no fuera muy querido, actualmente Van Gogh es uno de los pintores más famosos a nivel mundial. Numerosas pinturas han revolucionado el mundo del arte pero, sin duda, Los girasoles han marcado huella. Para hablar con propiedad, deberíamos decir obras ya que existen varias versiones de los girasoles en museos como el National Gallery (Londres), el Museo de Van Gogh (Amsterdam) o la Neue Pinakothek (Múnich).
Según dice el químico Oskar González Mendia, "Una de las grandes sorpresas que esconden estos girasoles es que se siguen marchitando a pesar de estar inmortalizados en el lienzo, dejando constancia de que el paso del tiempo también afecta a las pinturas".
El responsable de este marchitado sería el pigmento amarillo de cromo, formado a partir de la mezcla de nitrato de Plomo (PbNO₃) y cromato potásico (K₂CrO₄), que tanto utilizó Van Gogh.
Concretamente, se debe a un proceso de reacciones oxidación-reducción, donde el cromato (CrO₄⁻) del pigmento es capaz de reducirse (obtener electrones) para formar compuestos de cromo (III). Al formarse el cromo (III), la pintura adquiere una tonalidad verdosa.
Además, el pintor no usaba los mismos amarillos de cromo, por lo que se puede observar zonas más amarillentas, otras más anaranjadas, otras verdosas... Aquellas tonalidades más claras son capaces de oscurecer o "marchitarse" más rápido debido a que tienen una mayor cantidad de sulfato, un ión que acelera el proceso de degradación.
Cada girasol de Van Gogh es único, desde luego.
Hay momias trituradas en cuadros del s. XIX
Efectivamente, los restos de momias se han utilizado como un pigmento más. Eso sí, primero se trituran, siendo mejores las zonas más carnosas. Con esta información que da un poco de mal rollo, uno podría pensar que realmente este pigmento se usaba poco. Pero, no es así, Delacroix usaba mucho este marrón y lo reflejó en su famosa obra La libertad guiando al pueblo.
La libertad guiando al pueblo - Delacroix (1830)
De hecho, mediante una técnica llamada cromatografía de gases, se detectó en muestras de marrón de momia: aceite de lino, resinas, betún, cera de abeja y grasa animal (pudiendo ser de origen humano). Estos compuestos también han sido analizados en momias egipcias, pudiendo corroborar el origen de este pigmento.
¿Qué es la cromatografía de gases y cómo detectaron la grasa animal?
La cromatografía de gases es una técnica que nos permite separar y analizar mezclas de sustancias en forma de gas. Imagina que tienes una mezcla de diferentes sustancias volátiles, como los aromas en una fragancia. Esta técnica nos ayudaría a desentrañar esa mezcla y descubrir qué sustancias la componen.
Con esta técnica, hicieron un análisis de ácidos grasos. ¿Pero qué relación tiene con la grasa animal? La grasa animal esta formada de ácidos grasos, unas moléculas con una cadena de carbono acompañada de un grupo ácido, que dan lugar a los triacilglicéridos y que, a su vez, dan lugar a la grasa de nuestro cuerpo.
Ácido un placer compartir con vosotros estas curiosidades. Esta entrada ha sido inspirada por el libro "Por qué los girasoles se marchitan: Los elementos químicos en el arte" de Oskar González-Mendia.
4 Comentarios
Me ha encantado el post! Muy interesante :)
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu comentario!
EliminarQue curioso todo! No tenía ni idea de esto
ResponderEliminarMe alegro que hayas aprendido algo nuevo!
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